AERÓDROMO DE CUTRO VIENTOS. Exterior/día.
Estilismo recomendaría una cazadora de cuero, tal vez un mono gris, una máscara de oxígeno colgando por la pechera de forma desaliñadamente medida y gafas de pera Rayban para el chico y la chica. El visitante puede optar por hacer de Tom Cruise & Kelly McGillish en Top Gun atravesando las pistas de esta base militar; o bien de José Luis Ozores en Recluta con niño. Yo recomiendo esta segunda, puesto que fue la que se rodó aquí, un gran éxito de los 50 del siglo pasado sobre un soldado tratando de compaginar mili y hermano pequeño ¿Y se puede visitar? Para los aficionados a la aeronaútica es un debe. Poco conocido y sin embargo muy interesante, el Museo del aire reune en sus pistas y hangares aeronaves dignas de Tintin, con formas que te llevan a preguntarte si de verdad volaban. Para viajeros con niños, una parada recomendable.
Siguiendo con los alrededores, y encadenando el cine clásico con el contemporáneo, si antes citábamos el horizonte de la ciudad en el debut de Pedro Almodóvar, ahora le toca a otro director estrella del cine español: Alejándro Amenábar con Tesis. Abierta en horario lectivo, el visitante puede recorrer los pasillos de la Facultad de ciencias de la Información que inspiraron al ganador de Oscar por Mar adentro el guión de su primera película. La propia estructura del edificio haría las delicias de cualquier cineasta planificando una secuencia: Su exterior asemeja a un bunker, construida con cemento negro, se dice que fue diseñada originalmente para ser una cárcel. En su interior es curioso perderse por sus pasillos, cinco plantas repartidas de manera irregular, estos días muy animadas por los estudiantes gracias a los vaivenes propios del país, así que además de revivir aquellas imágenes de Ana Torrent corriendo por los pasillos, se puede tomar el pulso a la situación actual y lo mucho que han cambiado los tiempos desde que en los alrededores se rodaron películas con ambiente universitario como Muerte de un ciclista o Margarita se llama mi amor. Y ya que nos ponemos sociológicos, vía encadenado lento saltamos de oeste a este.
