El albergue perfecto
Este albergue es sencillamente perfecto; limpio, tranquilo, servicio personal y familiar y con todos los servicios que se suponen que deben tener los albergues; cocina, lavandería, excursiones, etc. Tiene "chil out" en el sótano, chimenea para el invierno en la primera planta y terrazas para el veranito en la segunda, en fin, casi casi todo. Para más "inri" su restaurante es sencillamente genial. Su carta, con precios asequibles a todos los bolsillos, aparte de servir una comida tradicional, y también no tan tradicional, tiene el honor de ofrecer el campeón de Aragón de......, "bocadillos"!! Sí, así como suena, su bocadillo de ternasco con cebolla caramelizada y su salsa especial de la casa es una auténtica delicia y como digo "todo" un campeón.