luisfernando
Una vez que terminamos de comer en el...
Una vez que terminamos de comer en el restaurante Kreiz an Avel en la playa de Carnac y aprovechando un receso de la lluvía que nos acompañó ese día, aprovechamos para hacer una pequeña visita a esta minúscula pero preciosa aldea.
Lo que más nos sorprendió de todo aparte de sus magnificas casas de piedra y techos de pizarra al más puro estilo bretón, fue el siencio y la soledad que nos acompaño durante todo el tiempo.
Al salir del lugar en dirección a Carnac, observamos un precioso rincón totalmente verde y al fondo una bella fuente de estilo gótico florido (flamboyant) del siglo XVI.
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