Antica Bottega del Vino

De todos modos, los platos más típicos de la cocina veronesa son los elaborados a base de guisos de carne acompañados por salsas típicas como la “Peará” o la “Peverada” (hechas, a grandes rasgos, a base de caldo, especias, mantequilla y pan rallado).

En lo que a primeros platos se refiere, destacan los “Bigoli” (espaguetis gruesos de grano duro) y los “Gnocchi di San Zeno”, que se preparan en Carnaval y se sirven acompañados de un estofado de carne de caballo (“spezzatino di cavallo”). Así pues, algunos de los primeros platos más destacables son: “bigoli con le agole”, “gnocchi di patate”, “pasta e fagioli”, “risotto al radicchio”, “risotto col tastasal” o las “tagliatelle con frattaglie di gallo”.

De entre los segundos platos, cabe diferenciar entre los de carne (“lesso e peará”) y los de pescado (“alborelle al forno”, “sardele in saor”, “tinca alle erbe”, “tinca in umido con piselli”). En cuanto a los dulces, es indispensable degustar el “Pandoro di Verona”, un bizcocho típico de la época navideña.

Las recetas de todos estos platos pueden consultarse en 'https://www.cucinaveronese.it/.'

Nada más llegar a nuestro hotel entablamos una animada conversación con uno de los recepcionistas, que al ver nuestro interés por la gastronomía local no dudó en recomendarnos una visita a la "Antica Bottega del Vino". Se trata del único local de Verona con la calificación de "local histórico" y su carta de vinos se halla entre las 10 mejores de entre todos los restaurantes de Italia.

La atmósfera del local es la de los típicos cafés históricos, con una decoración muy cuidada. Aún así, la barra y el expositor de quesos y embutidos típicos situado a la entrada del local tienen un diseño moderno muy atractivo. El trato del personal es sensacional y muy profesional.

La oferta del local está pensada tanto para aquellos clientes que quieren tomar una copa de vino acompañada por un "antipasto" (entrante, en Italiano) cómo para los que quieran degustar un menú completo de los mejores platos vénetos. Los platos que proponen para su menú diario permiten un recorrido fascinante por la cocina y los productos típicos veroneses y del resto de la región del Véneto.

Nosotros optamos por quedarnos en la barra y probar algunos platos codo con codo con otros clientes, dejándonos aconsejar por la camarera sobre qué platos y vinos blancos debíamos degustar. Así fue que acabamos probando una "selezione di salumi veneti" (selección de embutidos vénetos), una "selezione di formaggi veneti" (selección de quesos vénetos) y el "baccalà mantecato con crostini di polenta" (bacalao con polenta). Y todo ello regado con una selección de vinos blancos sencillamente alucinante!

Así que sí, que os recomendamos una visita a la "Antica Bottega del Vino" en vuestra visita a Verona, pues se trata de uno de aquellos locales que deja huella.