Las maravillas que pueden hacerse con sal!!!
Quien podría haber dicho, sin haberlo visto, que los artesanos que trabajan en La Salinas Grandes tiene tal habilidad con sus manos que les proveen el sustento diario con las artesanías de todo tipo y tamaño como las que allí producen y venden, al igual que las caserísimas tortillas rellenas que más de uno comía con fruición.
Allí a 3500 metros sobre el nivel del mar podías encontrar de todo lo que se te ocurriese y aún más. Lajas y piedras de sal trabajadas con esmero y dedicación, llamas pequeñas o más grande que la altura de un hombre para montarlas y fotografía, llamas más pequeñitas para colocar de adorno, cactus revestidos en tejidos al crochet para que se asemejasen a los que veíamos por allí al surcar los caminos, algunos con flores de colores.
Bufandas, pochos, chalinas gorras, pisa papeles, mulas cargadas con una tinaja de barro sobre una manta de guardas, morteros, lechuzas, porta papeles, corazones para usar de pisa papeles, bolsos, borlas de colores, jersey hechos con lana de vicuña, guantes, cinturones, mantas con guardas y muchos bloque de piedra de sal para llevar de recuerdo.
Por si algo faltaba para completar el paseo en esa día brillante de sol pero realmente helado, eran las tortillas rellenas dobladas al medio o no, que asaban allí mismo y te las vendían por pocos pesos. ¿Te habías olvidado la comida para el picnic o simplemente quisiste disfrutar de las tortillas? Sin problemas tenías las tortillas!!!!


