Música tranquila
Un sitio donde pasar el tiempo que quieras, con terraza en la calle, música tranquila, muy bien decorado, tardan poco en servir....
El camarero que atiende a las mesas es muy atento. Las patatas bravas están muy buenas, las pedimos con ali oli, una salsa muy buena en este sitio. Y pedimos a parte solomillo con cebolla caramelizada y queso brie....¡increíble! y mi chica, mollete de calamares con lechuga y salsa rosa.
Pero lo que me ha conquistado es que con el café y el cola cao de después, ha venido el detalle de la casa... ¡bomboncito de helado!