Auckland

La Ciudad de las Velas, así se la llama a Auckland por albergar en sus dos puertos más de 140.000 embarcaciones de vela.
El icono de la ciudad es la Sky Tower, una torre de comunicaciones con una altitud de 330 mts. Es aconsejable subir a la torre hacia el atardecer por cuanto se puede contemplar la espectacular puesta de sol.
El Museo de Auckland con la recreación de una casa maorí dotada de colecciones y de toda clase de objetos. La ciudad está rodeada de numerosos volcanes, la mayoría en activo, desde la cima de la colina donde está ubicado el Museo a parte de observar estos volcanes se puede disfrutar de impresionantes vistas. El peligro de erupción está latente y los habitantes están preparados para ello. La cultura de los cataclismos, al igual que Japón. Tanto es así que una de las recreaciones más visitadas en el Museo es el interior de una vivienda que a través de efectos especiales sufre un cataclismo con sonidos, movimientos, tsunami. etc.

Pues sí, eso es lo que significa su nombre en maorí, Tamaki Makaurau. Y es cierto, porque lo más fácil es enamorarse de esta preciosa ciudad que mira al mar, a la tierra y al cielo.
No hay más que fijarse un poco en su localización, entre volcanes y nadando entre dos aguas, las del mar de Tasmania y las del océano Pacífico, su caída en pendiente que nos lleva desde su punto más alto, el monte Eden, hasta su beso con la bahía de Okahu.
Llena de atractivos arquitectónicos como el Civic Theatre, la catedral de Saint Patrick, el Auckland Town Hall o la impresionante Sky Tower, horadada por volcanes ( unos 48 ) y refrescada por multitud de lagos y jardines, Auckland es a menudo elegida como una de las ciudades del mundo con mejor calidad de vida y habitabilidad.

La ciudad de Auckland es a Nueva Zelanda como Sydney a Australia. No es la capital pero si la ciudad más habitada del país y la más industrial. Eso no quita para que no sea interesante. Su oferta gastronómica es de lo más variada ya que esta es una ciudad llena de inmigrantes hace ya muchísimos años.
Su oferta cultural es imposible de seguir por el gran número de actividades que tiene, sobre todo si te gusta la música , aquí suele haber de todo a lo largo de toda la semana.
Los locales son buena gente y siempre predispuestos para ayudarte, siempre recalco cuando hablo de este país que, está muy muy lejos de todo y los nativos valoran el grán esfuerzo que es venir hasta aquí.