Kris por el mundo
Magnífico hotel en un lugar único
Visitar Bagan es un regalo para el viajero. Pero si además te alojas en este hotel es regalo es doble. Se puede elegir entre habitaciones o villas. Nosotros elegimos una de estas últimas con vistas a un lago tras el cual podíamos ver directamente alguno de los templos de Bagan. La piscina es otro de esos lugares mágicos en el que mientras te bañas disfrutas de la magia que te rodea.
Lo único malo es que está lejos de todo, y si quieres salir a cenar te cuesta más el transporte que la cena en el propio hotel
+2