Bagnolet

Bagnolet me sorprendió: esta pequeña ciudad, pegada a París, en el lado oeste, primero es asequible en metro, indispensable para quien esté en la capital gala.
Lo que me impactó fue al salir del metro estas altas torres de oficinas y hoteles, pero al tomar la calle SADI CARNOT, me adentré en lo que de verdad es un pequeño pueblo. Una primera plaza, con sus terrazas de sillas coloradas, me dio ganas de sentarme a descansar. Más adelante, siguiendo la misma calle, llegué a la iglesita. De ahí, subí para mi izquierda, y me perdí por las callecitas, hasta llegar al ayuntamiento: casas típicas, de las que salen en las pelis de JEUNET (Amélie), llenas de encanto!
Bagnolet cuenta con un cine (pero nada de versión original, así q hay q hablar francés), piscina, un parque, varios supermercados, entre los cuales un gran Alcampo donde perderse, en el centro comercial BEL-EST situado en la misma salida del metro GALLIENI.