Bajareque Coffee House

En este rincón no sólo sientes el sabor a café: el aroma impregna cada mesa, parece brotar de cada piedra que adorna sus paredes. Una máquina para procesar café, justo en medio del establecimiento, es la excusa ideal para tomarse una foto. Y no es sólo un adorno. Es la encargada de tostar el café que traen de Boquete, específicamente de la Finca Elida. Es un lugar pequeño, acogedor, el espacio justo para tomarse un café y un buen postre. La superficie de la taza es como un lienzo en el que el cafetero-artista pinta formas: desde osos hasta corazones. Lo que usted pida.
Fotos: Guillermo Machado