He visto en muchas ocasiones este...
He visto en muchas ocasiones este balneario urbano, frente a él estaban las instalaciones de la UNED donde realicé más de una carrera y frente a él continúa estando el trimilenario drago, delante de la entrada de la Facultad de Ciencias. Llegas a Cádiz cruzando por una larga avenida y al pasar bajo Puerta de Tierra doblas a la izquierda. Sigues bordeando el mar durante al menos un par de kilómetros. Llegas a la recoleta playa de la Caleta, marinera y urbana. Allí está el balneario.
Aquí había a inicios del siglo XX dos balnearios, uno llamado del Real y otro de la Palma. Ambos construidos en madera pero con mucha afluencia. En 1924 la Diputación Provincial convocó un concurso de diseños para sustituirlos por un balneario en mejores condiciones. Se eligió el proyecto de Enrique García Cañas, al que un arquitecto de Diputación, Juan José Romero Aranda, modificó para que se pareciese al balneario de la Palma.
En 1926 se inauguró el balneario. Se pasó de los barracones de madera a una estructura modernista que, en aquellos momentos, rompía la estética del paisaje. Con el tiempo no se entiende a la playa de la Caleta sin su balneario. De hecho recuerdo que hace algunos años se rodó una película sobre Cuba en esta playa utilizando el balneario como fondo ideal para las distintas escenas. Me pilló allí mismo y pude comprobar cómo un edificio modernista encajaba perfectamente en la idea de una construcción colonial, de cómo el hormigón armado sin recubrimiento alguno puede alcanzar belleza visual.
El balneario se divide en dos partes. El pabellón de acceso da directamente al paseo marítimo. Cruzándolo entramos en las dependencias del balneario, situadas a mayor nivel que la playa en la que se apoya sobre finas columnas hundidas en la arena.
Las dependencias se articulan en dos curvas que salen de un espacio central. En estas dos alas hay torres acabadas por cúpulas bulbosas.
Interiormente lo más destacable, junto con el diseño de los pabellones, es el panel de azulejos de la Virgen de la Palma, de Justo Ruíz de Luna. Todo el conjunto desprende delicadeza, es un edificio modernista con claras influencias musulmanas, tal como los balnearios ingleses, consecuencia del ingeniero constructor que al ser de esa nacionalidad también modificó parcialmente el inicial proyecto.
Entre 1936 y 1943 el balneario fue Escuela de Flechas Navales, posteriormente se utilizó como sala de proyecciones. En 1958 lo adquirió un particular dedicándolo a balneario así como a local de fiestas. En 1975 estuvo a punto de ser demolido por su estado. Actualmente es la sede del Centro de Arqueología Subacuática de Andalucía.


