Bar Restaurante AISA

Cansados de coche, nos detuvimos en este pueblo de los alrededores de Zaragoza a cenar. Beatriz, con una sonrisa permanente nos ofrece la carta, pero puede más el cansancio que el hambre. Con una paciencia infinita nos sugiere un entrante de bonito con boquerones y aceitunas; muy suave y muy rico. Una ensalada mixta con jamón y medio conejo a la brasa acompañado de patatas fritas (patata-patata) y un ali-oli de muerte, con unas copas de vino rosado, nos devuelven a la vida. ¡Qué forma de tratar al viajero!

Al día siguiente, a las 7:00 desayuno y Gran Premio de Australia de Fórmula I, con el propietario. No hay muchas personas con ese buen humor a esas horas. Gracias de verdad.

Se come genial, comida casera y variada. Beatriz sigue siendo simpática igual que todas sus compañeras.

Cada jueves repito.

Restaurante de tradición familiar que ha sabido hacer la transición de abuelos, tíos y sobrinos y perdurar en la esencia.

Restaurante ideal para ir con niños, tiene un parque de bolas donde se lo pasan en grande.

Tienen menús y carta. Personal atento y servicio rápido, además de comedor amplio para grupos.

La mejor relación calidad/precio en Zuera. Amplio salón comedor climatizado. Atención esmerada y trato amable. Siempre recomendables los platos de verduras y legumbres y las carnes guisadas.

Lugar perfecto, muy buena calidad-precio y platos hechos con cariño