Hay dos calles en el casco antiguo de...
Hay dos calles en el casco antiguo de Santiago de Compostela que está repletas de bares y restaurantes en los que se pueden degustar los platos más característicos de Galicia. Son dos calles peatonales, lo cual facilita mucho todo ya que los bares se suelen llenar hasta los topes pero no hay ningún problema es sacar las bebidas al exterior cuando hace buen tiempo. Estas calles está situadas junto al callejón de Entrerrúas, muy cerca de la catedral.
Todos los establecimientos de esta zona actúan tanto de bares como de restaurantes, así que dependiendo de nuestras preferencias podremos comer a base de tapas o si lo preferimos, podremos comer sentados en un excelente comedor.
Si lo que queréis es comer sentados os recomiendo que optéis por el pescado o el marisco. Muchos de estos establecimientos exponen en las vitrinas que tienen de escaparate centollos y langostas gigantescas o incluso unos peces que son de un tamaño espectacular.
En cuanto a los precios la verdad es que me esperaba que fueran más caros, ya que es una zona extremadamente turística y normalmente no me fio mucho de los establecimientos que te muestran de primeras las cartas en todos los idiomas. De todos modos, todo depende de lo que se pida, por supuesto.
El mayor problema que tienen estas calles es que es imposible pasear por ellas sin caer en la tentación de comer algo, porque el olor que sale de estos locales es una auténtica maravilla.
Por cierto, si vais de tapas os recomiendo comer de postre un pastel típico de alguna de las pastelerías-panaderías que hay en la zona, están buenísimos.


