Desde el Hanul Luí Manuc, te puedes ...
Desde el Hanul Luí Manuc, te puedes perder en las viejas calles de Bucarest, andar donde te llevan tus pasos, observando sucesivamente estas viejas casas que siguen perteneciendo a la misma familia desde hace siglos, las que fueron renovadas por los jóvenes para hacer un café a la moda, las tiendas que siguen vendiendo botones y bienes de consumo tan viejos que nadie los quiere ya… Un vecindario de construcciones mal cuidadas por falta de dinero, y de lugares entre los más codiciados de la ciudad, bares, restaurantes y tiendas de arte. El ayuntamiento está ayudando el barrio en su renacimiento, contribuyendo a la refección de las calles, que seguramente no han visto a ningún obrero desde la segunda guerra mundial. Las carreteras se vuelven a poner a un buen nivel, las alcantarillas se limpian, y el precio de las casas sube de repente.