Un B&B renovado, con ambiente desenfadado
Me suele gustar el concepto de bed & breakfast, ofrece muchas veces un trato más personal y cercano que lo que puede ofrecer un hotel u otro tipo de alojamiento.
En este caso, me llamó la atención encontrar un alojamiento de este tipo en Bruselas, bastante cerca del centro, es por ello que, huyendo de los fríos hoteles más business de la capital europea, en este viaje de trabajo, me decanté por este tipo de alojamiento.
La situación es bastante buena, no muy alejado del centro, y hay parada de metro bastante céntrica a menos de 10 minutos andando. El barrio es el típico barrio antiguo y bohemio de Bruselas, tiene su encanto, y como ocurre en todos los barrios que rodean el corazón de la EuroCity, hay bastante inmigración. No lo digo en plan despectivo, pero puede haber gente, sobre todo gente mayor, a la que le dé cierto reparo caminar por estas calles a la tarde-noche, sobre todo si vas solo, porque es bastante habitual que haya mucha gente en la calle, tiendas y portales. En fin, esto es lo habitual en muchas ciudades, y nosotros no tuvimos ningún problema en absoluto, pero a gente "tradicional", le puede dar "yuyu".