Algunos lugares son tan hermosos que...
Algunos lugares son tan hermosos que uno no tiene otra opción que callarse y contemplar en silencio.
Los "Begijnhof" (Beguinajes) son este tipo de lugares, y el de Brujas en especial. Su nombre completo es "Prinselijk Begijnhof Ten Wijngaarde" y fue fundado en 1245.
Actualmente, ya no está habitado por beatas sino por monjas benedictinas. Aún así, todavía se puede visitar la casita del convento y ver como se desarrollaba la vida cotidiana de las beatas de entonces.
La tranquilidad que se respira en su jardín interior de paredes blanqueadas es tal que acaba por dejarte sin palabras, así que tómense su tiempo ya que se trata de un sitio para disfrutar con calma.
Es de esos lugares en los que parece haberse detenido en el tiempo, convirtiéndose en una experiencia inolvidable para todo visitante a la ciudad de Brujas. Hay que tener en cuenta que la puerta de entrada al beaterio cierra puntualmente a las 18:30.