Un precioso pueblo de costa que se debe visitar, con buena gastronomía. Está en la provincia de La Coruña. Es pequeño, muy coqueto, pero merece la pena ir y perderse por sus empinadas y angostas calles.
Este es el lugar donde vivo, paraíso entre ríos en donde se funde lo rural y lo urbano, la ciudad el pueblo y la naturaleza donde la tranquilidad se esconde en cada rincón de sus calles viejas, nuevas y cargadas de historia pues aun siendo un sitio pequeño tienes museos, casco antiguo y casco más antiguo a pocos kilómetros de Coruña, de las playas y del mar.
He de decir, que por Betanzos, haciendo el Camino de Santiago pasé por equivocación, y para mi sorpresa, fue uno de los municipios más bonitos y relajados que he visto, en las calles se respira pureza y tranquilidad.
Indagué un poco más por el pueblo, y resulta que tiene una gran cultura, unas iglesias preciosas, como la de San Francisco, unos paisajes que quitan todas las penas, y unas puestas de sol que dejan sin palabras.
Quería compartir este post, porque me parece que no es un sitio muy turístico, y a mi me atrajo desde el primer momento.
No es la típica ciudad conocida y plenamente turística que todo el mundo quiere ir alguna vez en su vida, es un pueblo con un encanto innato y bastante desconocido para la mayoría de personas.
Noche gastronómica en Betanzos.
Para comer: a cova do frade, lastras,pirri,picola,Vega...En cualquiera de ellos se come genial
Para tomar una copa en preciosas terrazas: zojo, tribeca,Versalles...
Una noche ideal
Pueblo pequeño cerca de Coruña. Zona antigua muy bonita con multitud de iglesias. Pueblo muy curioso y bonito.
Betanzos es una ciudad de 14.000 habitantes, tiene un casco histórico muy bonito, pasear por sus calles y entrar en sus iglesias te devuelve a la época medieval.
Localidad que tuvo sus inicios en un castro celta y conserva restos de su muralla medieval y varias de sus puertas. Sus calles con soportales y las casas con galerías de cristal forman un agradable conjunto en el que destaca también la iglesia gótica de S. Francisco con un curioso sepulcro, y a la de Santa María del Azogue, de origen pre-románico y reedificada en el s. XV.
Por ésta última pasó el temible Erik el Belga, un auténtico pirata del siglo XX, que cometió robos en toda Europa. Entre ambas iglesias se extiende una bonita plaza presidida por el inconfundible cruceiro.
Pero sobre todo no te pierdas los jardines del Pasatiempo, situados a las afueras de Betanzos y pendientes de una larga rehabilitación. El delicioso lugar, quizás único en todo el país, fue construido por unos indianos que pretendían dar a conocer a sus convecinos las maravillas del mundo y los inventos más destacables del siglo XIX.
