Búzios

El litoral brasileño es sencillamente alucinante. Es tan enorme y diverso que necesitas meses para recorrerlo entero. Pero si dispones de pocos días y buscas relajarte al estilo brasileño, o sea absolutamente, coge un vuelo a Rio de Janeiro y desde el mismo aeropuerto un transfer (nada más que dos horas) a Búzios.
Vente con una maleta pequeñita: En este paraíso sólo necesitarás un bañador, un par de camisetas, un pareo, protección solar, un sombrero, gafas de sol. Ni siquiera traigas zapatos: En Búzios te compras un par de ‘ojotas’ Havaianas y con eso andas todo el día.
En este rincón de marineros descubierto recién en la década del 60 y frecuentado en aquel entonces –entre otros- por Brigitte Bardot, hay más de 20 calas de agua trasparente y cálida. Pequeñas, grandes, desiertas, más concurridas. Con olas para surfear y sin olas para bucear. Con arena gruesa y arena fina. A algunas sólo llegas a pie atravesando bosques tropicales o bordeando acantilados, a otras en un buggy alquilado, un divertido carromato de plástico con un básico motor de coche y descapotado. Por la comida, despreocúpate y goza: Aunque estés en una cala perdida, siempre aparecerá un vendedor con ostras frescas, ‘siris’ (cangrejos) recién asados, ‘milho quente’ (mazorca de maíz caliente) y zumo de coco, que se bebe, naturalmente, del mismo coco.

El Pueblo de Benagalbón, pertenece al municipio de Rincón de la Victoria, en la Axarquía malagueña, y al igual que los de toda esa zona, es un pueblo blanco y alegre, donde aún se conservan las tradiciones populares.

Benagalbón fue fundado por los Galb-un (una tribu beberer) que introdujeron la agricultura y crearon su fuente de riqueza, que era la vid, y la explotación de la pasa y el vino.En el siglo XV Benagalbón era una alquería con una torre de defensa en su litoral, situación que le benefició , ya que los reyes Católicos al finalizar la conquista de los mudéjares, ordenaron que no podían residir a menos de cinco leguas de la costa, y los que no quisieron abandonar sus propiedades, se trasladaron a vivir allí.

Playas preciosas y mejores atardeceres, buen buceo, gente increíble. Si andas por Brasil no te lo puedes perder.

Recomendable no venir en la temporada más alta. es decir enero y/o febrero. Esos dos meses hay demasiado turista, el resto del año es tiempo es fantástico también.

Es mi ciudad favorita de Brasil, no conozco demasiado pero estuve en varias de Bahía, en Florianópolis, Bombinha, Río, San Pablo. La seguridad, la tranquilidad y hay de todo, paseos, restaurantes, playas, mar, negocios, etc. Todo muy bien, la gente y su hospitalidad. Los precios normales nada excesivamente caro. Genial.

Búzios es un destino muy procurado en el Brasil, posse 24 playas para todos los gustos, gastronomía de primer nivel, vida nocturna, gente linda y un astral incomparable. Puedes escoger entre mas de 400 Pousadas o Hoteles, decenas de restaurantes.

Hacer buceo, snorqueling, passeos de barco, nudismo, deportes radicales, observacíon de ballenas e delfines, senderismo, etc.

Un lugar que merece conocerce y aprovechar todas su posibilidades, para todas las edades e para todos los presupuestos.