Parada dulce en Rostock
Kröpeliner es la calle peatonal más importante de Rostok. Tiene tiendas de moda, centros comerciales, restaurantes y, por supuesto, cafeterías. Una de ellas es Backhus, una especie de café y panadería juntas que tiene una barra llena de culces y algunos bacados salados.
Tiene una terraza puesta en la calle. Cuando nosotros fuimos, aunque no hacía especialmente calor, estaba llenísima de gente, sobre todo alemanes pillando algunos rayitos de sol. El interior estaba más despejado, y en la zona de fumadores (sí, tiene zona de fumadores) había varios sitios libres.
Después de mucho meditar, nos decantamos por lo dulce. Un muffin de chocolate, un típico cruasán y dos tazones de chocolate bien calientes. Después de recorrer parte de la ciudad andando, tengo que decir que entraron súper bien y nos supieron a gloria.