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Split es una ciudad preciosa, con sus...
Split es una ciudad preciosa, con sus calles tortuosas, el único problema, con las restricciones para preservar esta ciudad, patrimonio mundial de la UNESCO, es que no se puede cambiar nada de la arquitectura antigua de la ciudad. Y en la época medieval, se construían las casas muy cerca las unas a las otras, para ser más compacto y fuerte en caso de ataque. Por eso, a parte de la plaza Narodni y del peristilo, la ciudad tiene poquísimas plazas amplias, y por lo tanto pocas terrazas de cafés.
La plaza kovacevic es una de estas pocas plazas, y tiene el caffé Get, un café que sirve copas y algo para picar, pero no hace cocina. La decoración me gustó y el trato es amable.
Los precios son decentes considerando que estás en verano en una de las ciudades más turísticas de la costa adriática. Las sillas con cojines son más cómodas que la mayoría de las de los demás bares. Es una plaza tranquila, donde no pasa mucha gente y puedes aprovechar tu copa tranquilamente.
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