En la parte alta de Arcos de la...
En la parte alta de Arcos de la Frontera, en la entrada al Castillo medieval, llamada Calle Cuesta de Belén hay un edificio llamativo que no suele aparecer en las guías de turismo. Se trata de un caserón de procedencia andalusí que en el siglo XIX fue remodelado en estilo neogótico.
Algunos confunden su entrada afirmando que se trata de gótico tardío (¡y tan tardío!) con influencias mudéjares. No es así sino el resultado de la moda historicista que hizo furor entre los ilustrados durante el siglo XIX. Su ideal era el renacimiento de las artes medievales, lo que explica la fusión entre lo aparentemente gótico y los elementos mudéjares, algo que en el arte medieval no se concebía en las fachadas sino en los artesonados y en la distribución de los espacios.