Casa Ramón

Buen restaurante, enclavado en una plaza muy bonita y pintoresca, en la que se pueden saborear platos de la gastronomía tradicional asturiana, y de otras zonas de España (tenían, por ejemplo raciones de gambas blancas de Huelva).

La sidra como hilo conductor, un cachopo, unas buenas fabes o gran cantidad y variedad de marisco... te sientes un poco más de la zona.

El arroz caldoso es bueno, aunque tardan bastante en hacerlo (también es normal).

De precio es normal para una zona turística y enclavado en el entorno donde se haya.

El trato del personal, correcto.

El Restaurante Casa Ramón es uno de los más emblemáticos de Oviedo.

Situado en la plaza del Fontán, se llena de gente en los días de mercado y también en los que no lo hay, por su fama y sus deliciosos y variados pinchos.

Dicen que el carácter de su dueño Ramón es un tanto especial, y que dependiendo del día, puede ser más o menos agradable.

Siempre que vayáis al Fontán, no dudéis en pediros un buen caldo de marisco (si es verano/primavera una sidra) acompañado de uno de sus pinchos. No os defraudará.

Fuimos a comer tras mirar los comentarios del restaurante y nuestra experiencia fue excelente, las fabes riquísimas, el jamón muy muy bueno y las gambas de Huelva exquisitas. Volveremos sin duda.
El trato del personal muy profesional y humano, en especial a José Antonio que nos hizo un favor al olvidar unos juguetes de mi hijo. Estaré siempre muy muy agradecidas.
Si pasan x Oviedo no duden en pasar por Casa Ramón

La primera vez fue en los 70, luego en los 80 y en el siglo XXI, desde que se fue Ramon ya nada es igual, al principio mas o menos, hoy fui me cobraron mas de 3 euros por una sidra mediocre los camareros pendientes del teléfono, no había casi gente porque era alrededor de las 4 de la tarde, un horror.

Nada recomendable

Si pasa por Oviedo, una de las experiencias que debe tener es parar por una sidra natural en la Casa de Ramón, donde sus meseros la servirán de la forma tradicional.
A un precio racional (€2,6 la botella de sidra)

Un sitio que no debes dejar visitar, por sus empleados, como sus dueños, te dan un trato casero y familiar, comida y platos, pinchos, menús...

Casa reformada con todas las de la ley, respetando las antiguas columnas, alberga a un bar restaurante con encanto, suelo parar los días de mercado, me encanta.

Terraza sidrería tradicional.