Podría haber sido espectacular!!
Su punto fuerte es la localización, tiene unas vistas maravillosas y una tranquilidad increíble que es lo que más hemos valorado. Además está muy bien situada para visitar lo más bonito de Salamanca pero, y ahí viene el pero, le faltan mejoras interiores claras.
Los colchones, excepto en la habitación principal, están para cambiar, los sofás también, están viejos y la funda que tienen da algo de repelús. A la cocina habría que cambiarle todos los utensilios (platos, cubiertos, oyas y sartenes , se pega todo!!). Además no hay cosas básicas como escurre pasta o pinzas.
Los armarios de las habitaciones se ven viejos, son pequeños y apenas tienen perchas.