Una obra maestra del cincel.
Este Jubé data de principios del siglo XVI. Originalmente era la tribuna donde el oficiante leía los textos sagrados comenzando "Jubé Domine Benedicere" traducido "Dignate Señor bendecir". La repetición de esta frase hizo que ese lugar tomase el nombre de la primera palabra.
Se encuentra tallado en piedra calcárea tierna que con el paso de los tiempos se ha ido endureciendo. En un principio en las horcinas que contiene se acogían 75 estatuas que lamentablemente fueron destruídas durante la revolución.
Consta de tres puertas siendo las laterales las que dan acceso al deambulatorio