Una de las pocas cuevas visitables
A la derecha de la Cala del Moraig, se encuentra esta cueva que según me han contado sirvió en la antigüedad como refugio de marinos al igual que de abastecimiento de agua para la población.
Protegida a la entrada con una especie de dique y unas pequeñas escaleras artificales, nos encontramos con que es la salida al mar del curso de agua subterránea más largo de España y que por supuesto no llegamos a comprobarlo, ya que para ello hay que ser un avezado espeleólogo y adentrarse por la cavidad que observamos a nuestra derecha y mi body a estos años no está para estos trajines. Solamente con procurar no resbalarme en las rocas mojadas por el agua del mar ya tuve más que suficiente.