Cavernas junto al mar
En la isla de Enoshima encontramos este par de cavernas creadas por la erosión del mar y habilitadas para la visita turística.
El primer registro histórico de Iwaya data del año 550 y, durante mucho tiempo, fueron utilizadas como lugar de oración por los monjes.
Según la leyenda, sobre el siglo VI la isla surgió de las aguas debido a la acción de la diosa Benzaiten, la cual apareció para aplacar la ira de un dragón que atemorizaba a los lugareños. Maravillado ante la diosa, el dragón le pidió matrimonio y prometió hacer el bien, recluyéndose en el fondo de las cavernas de Iwaya.
Las cavernas (en realidad es una gruta doble) se encuentran en el lado opuesto del acceso a la isla, requiriendo un constante subir y bajar de escaleras. Sin embargo, existe la posibilidad de tomar un ferry desde el embarcadero de Fujisawa.
¿Y qué podemos encontrar en estas cuevas?
En la primera de ellas, podemos ver estatuas budistas, recorriendo parte del camino a la luz de una vela que nos dan en el interior. En la segunda cueva, dedicada al dragón que aterrorizó la zona, podemos disfrutar de unas preciosas vistas al mar y aprender sobre la historia del dragón, cuya figura nos espera al final del recorrido.
No podemos esperar de estas cuevas el atractivo turístico de otras de mayor tamaño, pero sí son unas pequeñas cavernas curiosas que permiten observar el mar desde el mirador que las conecta (especialmente recomendable ir al atardecer).
Más información:
Horario: Apertura a las 09:00, cierre a las 16:00 (invierno) y entre las 17:00 y las 18:00 el resto del año (varía según épocas, lo mejor es consultarlo en la web).
Apertura diaria, salvo en días de mal tiempo.
Precio: 500 yenes
Página web: 'https://www.fujisawa-kanko.jp/spot/enoshimaiwaya.html' (en japonés, pero existe una opción de traducción automática al inglés en el menú superior)
