Ciencia para todos los públicos.
Dicen los cuadernos de viajes que, dedicando un minuto a cada pieza expuesta en éste museo, se tardarían...¡36 días! en ver todo lo que ofrece. Situado en un islote del río Isar, éste enorme teatro de ciencias, es el más visitado de Alemania y uno de los mayores del mundo dedicado a la ciencia y la tecnología.
Contiene más de 17.000 piezas, desde el simple reloj de sol hasta un transbordador espacial.
Si vas en grupo, lo mejor es hacerse el "sordo"y hacer la visita en solitario.
Son 8 horas de un lado para otro, de asombro en asombro, que al fin acaban cansando, aunque la intensidad de la visita, te hace olvidar el pateo que te estás dando. Por éso digo lo del grupo. Porque si al palizón añades..ehh...¿has visto la bomba V-2?. No?, pues ven, está aquí mismo. Y vas. Y resulta que está en tu recorrido, pero más tarde. Te picas y le preguntas...¿y tú, el transbordador espacial?...¡qué va!.¿pero qué dices?, ven, ven y te vuelves por donde habías venido, para enseñárselo. De locos.