Penoso
En primer lugar tardaron 25 min en darnos mesa cuando teníamos una reserva para las 15:00h, pero cabe destacar que además había dos comedores con las mesas montadas totalmente vacíos.
Después de estar sentados, nos traen el aperitivo, sin pan, por lo que pedimos pan a uno de los camareros, viendo su muestra de indiferencia ante nuestra petición, decidimos pedir pan a un segundo camarero con cierta falta de higiene ( por el olor tan fuerte a axila revenida que desprendía) pero que nos trajo el pan ( eso sí, dos porciones y éramos tres comensales).
A la hora de servir el entrante no tenemos queja alguna, pero pero si hablamos del plato principal, no corrimos la misma suerte. El cochinillo muy seco para el gusto de mis acompañantes pero en general correcto. En mi caso, pedí la merluza al horno con salsa de puerro y gambón, pero lo que realmente había en mi plato, era una gran ensalada con un trozo de merluza completamente lleno de ajo y el agua de la ensalada como salsa, por lo que la salsa de puerro y gambón quedó en el olvido de la cocinera ( lo pongo en femenino, ya que le pregunté al camarero que donde estaba la salsa, el cual fue a cocinas y luego me comentó que la cocinera le dijo que la salsa estaba ahí) así que dado que no me agrada demasiado el ajo, no me lo pude comer.