Restaurante para volver y volver. BRAVO
Durante nuestra estancia en Avignon, repetimos varias veces en este pequeño pero encantador restaurante que nunca nos defraudó.
Se encuentra en una calle estrecha y peatonal al lado de la Plaza Crillon, es decir, cerca de una de las entradas de la muralla llamada la puerta de l´Oulle y también a un paso del Palais des Papes. Productos de Excelente calidad y siempre en su punto. Y qué decir de los postres.....una maravilla.
A mediodía se puede escoger entre comer a la carta o un menú por 15 euros que incluye: plato del día, postre del día o queso, café y copa de vino. Cada día el chef crea un nuevo plato, siempre delicioso. Se le puede ver en faena ya que la cocina está abierta a la entrada del local. Costillas de cerdo con arroz y aiguillettes de pato con quinoa son ejemplos de los platos del día que pudimos degustar. Como postre del día tuvimos la suerte de que nos tocara una sopa de fresa y chocolate blanco DELICIOSA.
