La estatua más grande en su categoría
A escasos 14 kilómetros de Kuala lumpur, las cuevas de Batu son uno de los lugares más curiosos que ofrece la capital de Malasia. Famosas por su enorme figura de Murugan, un dios hindú, la más grande del mundo para este dios. Como centro de peregrinación que es, las cuevas están siempre llenas de indios emigrantes que viven en Malasia o venidos de otras regiones cercanas. Es el centro de peregrinación hindú más importante fuera de la India y por eso se entiende que siempre esté lleno de gente haciendo algún tipo de rezos. Durante los cientos de escalones que tiene la subida, podemos encontrar fácilmente familias enteras de monitos que se mueven a sus anchas, peleando por la comida que los turistas les echan, quitándose parásitos o sencillamente moneando.
Llegar hasta estas míticas cuevas es fácil desde Kuala Lumpur y se puede hacer directamente en metro, por un euro y en unos 25 minutos. La cueva más grande (que a su vez está formada por varias cavidades) es gratuita, pero en cambio, hay algunas otras más pequeñas que cuestan dinero por tener actividades diversas asociadas.
