Faro de Fuencaliente

Justo en el punto sur de la isla de la Palma se encuentra este característico lugar que no puede faltar en tu visita a la isla. En medio de un escenario volcánico de roca negra y contraste con el azul marino, se levanta el faro o, mejor dicho, se levantan los dos faro.
Porque, efectivamente, hay dos. El antiguo, gris, y el nuevo, rojo y blanco. Además, allí mismo, se puede aprender mucho sobre la fauna marina de los alrededores en el Museo del Mar, que bien merece una rápida visita.

También se pueden visitar, a escasos metros, las espectaculares Salinas de Fuencaliente.
Es verdad

El faro de Fuencaliente, en realidad los faros de Fuencaliente, porque hay dos, el antiguo, con la tradicional vivienda de farero adosada, y el nuevo, una torre cilíndrica pintada en franjas rojas y blancas, están en una zona volcánica con siete volcanes, al sur de la Palma, con paisajes espectaculares y muy cerca del Parque Natural Cumbre Vieja y Teneguia.

Muy cerca está la playa del mismo nombre, con bonitos fondos para buceo y pesca.

El Faro original entró en servicio en 1903, y un terremoto en 1939 lo dejó inutilizado, y se construyo una torre nueva de hormigón armado, sustituida en 1985 por el nuevo torreón.

Al sur de la isla de La Palma encontramos dos faros, uno de principios del siglo XX que sufrió mucho daño durante la erupción del volcán Teneguía por lo que contruyeron otro al lado mucho más moderno.

En 2006 se reconstruyó, y dentro hicieron un Centro de Interpretación, que tanto les gusta hacer aquí, pero a mi parecer es pequeño y cutrillo. Aún así vale la pena entrar al menos para ver la escalera de caracol que sube al faro. Es una visita interesante con vistas espectaculares hacia el Teneguía, el océano y las salinas.

Un agradable sendero es ir desde el municipio de Fuencaliente y bajar hasta el faro andando.

Los Faros de Fuencaliente muestran el contraste entre las construcciones clásicas y las modernas. Aunque los dos tienen el mismo propósito, son completamente diferentes. En pocos sitios podremos encontrarnos un contraste de este tipo.

Pero tampoco hay que desmerecer el entorno en el que se encuentra. Con las salinas a un lado y un enorme acantilado, los faros se encuentran en un lugar espectacular que hay que disfrutar.

Puedes bajar hasta una pequeña plataforma junto a unas rocas desde las que puedes ver cómo el mar rompe desde un nuevo punto de vista.

Para mí fue de