Santiago Orduña
¿Te gusta el Rastro o los mercadillos ambulantes? pues sigua leyendo
Me perdí tres veces: una vez entré, cuando me puse a deambular por el laberinto y sólo Dios sabe por qué puerta salí. Si eres muy de rastros, rastrillos y mercadillos, la Feria Balta está hecha a tu medida -sin límites-. Tiendas y tiendas de todo tipo: souveniers, electrónicas, artesanías, un restaurante, platería, ropa, joyería...y todo ello con muchos vendedores con ánsias de negociar.
Un poco a lo zoco árabe, tendrá que comaparar las distintas ofertas, cambiar mentalmente el valor de las divisas, preguntar un poco a los autóctonos que sean de fiar, todo con el objetivo de encontrar un buen regalo de la mejor calidad y evitar así ser estafado como cuan pardillo turista.
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