Formigal

Luego de pasear durante 15 días por el Sur de Francia y el Norte de Espana paralelo a los Pirineos, decidimos dejar un día para subir a Formigal que si bien era conocido por sus pistas de esquí, no sabíamos que pasaba en pleno verano.

La sorpresa fue maravillosa: la naturaleza en pleno, embalses que nos regalan lagos azules hermosos. Posibilidad de largas caminatas y miles de actividades.

Hay increíbles pueblos para visitar en la zona pero si tuviéramos que elegir uno seria LANUZA con típicas casas de piedra junto al embalse. Es como entrar en un cuento de hadas.

Todo el valle de Tena es de una belleza increíble, su gente muy agradable y su comida... ¡Su comida!

Sin duda volveremos pero esa vez por mucho más tiempo.

Formigal, muy bien conocida por sus fantásticas pistas de esquí de Aramón, un lugar donde no solo los deportes de invierno son el único entretenimiento, sino que además, sus increíbles paisajes hacen de ello una excursión maravillosa.