Impresionante paseo en helicóptero por el Glaciar de Briksdal, brazo del Glaciar más grande de Noruega, el Jostedal. Algo que visitar cuanto antes, puesto que por culpa del cambio climático el retroceso de los glaciares aumenta a pasos agigantados. Los colores son indescriptibles, el hielo azul es hielo que lleva miles de años congelado.
En mi crucero por los fiordos noruegos me gustaría compartir con vosotros: el paseo más bonito que recuerdo, un consejo y una advertencia.
La pequeña ruta de senderismo que sube hasta la lengua del glaciar empieza en un valle rodeado de montañas y cataratas que se divisan a lo lejos. La subida es exigente, así que si vuestra salud no lo permite podéis hacerlo en unos coches (caros, 25€) que se encuentran abajo. A medida que subes verás rápidos, pasarás por un puente salpicado por una gran cascada y llegarás al lago que forma el deshielo del glaciar con la espectacular lengua al fondo. Si bonita son las fotos, la realidad las supera.
Eso me habían dicho, que el hielo era de color azul y con el fin de comprobarlo nos dirigimos al Parque Nacional de Jostedalsbreen en el condado de Sogn Og Fjordane en Noruega para contemplar el Briksdalsbreen o glaciar de Briksdal, uno de los glaciares más conocidos y más accesible del país.
Desde donde dejas el coche tras una hora más o menos de caminata por el parque llegamos hasta la lengua del glaciar y tengo que decir que impresiona bastante ver el tamaño del mismo en su deshielo al lago y su intenso color azul.
Mi recomendación al llegar al glaciar es ponerse unos crampones
Cerca de Stryn, en la región de Sogn og Fjordane en Noruega, rodeado de una naturaleza que te deja sin aliento está el glaciar de Briskdal, una de las lenguas del enorme glaciar de Jostedal uno de los mayores de Europa.
Después de una pequeña caminata por un hermoso valle desde el lago de Lovatnet, al que llegamos desde la población de Loen nos encontramos de bruces con la mole de hielo de esta lengua del glaciar, con su color azul tan característico y el sonido del hielo resquebrajándose, tan fascinante aterrador y místico a la vez.
Si vais a Noruega no os podéis perder esta
