Take away junto a la Cueva de Calispo
Que donde hay turista hay chiringuito es algo como muy español y, por lo que parece, también bastante maltés. Hasta en el mirador de la Cueva de Calipso, enclave remoto que a diario visitan miles de persones, existe una pequeña 'pastizzeria movil' claramente pensada para satisfacer el capricho del turista.
Es muy fácil de ver e imposible de confundir, es el único ‘local’ de comida que encontrarás en la zona. Pero oye, que a pesar de su monopolio sus precios no resultan prohibitivos. Un pastizzi de guisantes o de queso cuesta 0,50 céntimos (en Victoria, la ciudad más cercana, puedes conseguirlo por 0,25 o 0,30), que no es una ganga pero tampoco es un precio de echarse las manos a la cabeza. También venden otros pasteles, porciones de pizzas y perritos calientes, nada por encima del 1,50. Si tienes sed el agua está a 0.50 euros.
