Una antigua joyería convertida en café
En plena calle Alfonso I estaba la joyería Aladrén, de finales del siglo XIX. Hace unos años cerró y se convirtió en un café que conserva la mayor parte de su fabulosa decoración, aunque no el mobiliario, que en parte esta en un anticuario de la vecina calle Candalija.
Tomar un café en el salón interior o en lo que fue el despacho es todo un viaje a aquella Zaragoza de 1900, de la que la calle Alfonso I es el escenario mejor conservado. Una ciudad que ha despegado gracias a la llegada del tren, la industrialización...
Los Aladrén, dueños de la mejor joyería de la ciudad, se harán también una magnifica tumba, probablemente la mejor del cementerio de Torrero.