Kris por el mundo
Buen palacio, no tan buen museo
Unos kilómetros antes de llegar a Kochi se puede parar para visitar el que fue palacio de los reyes de Kochi. Está rodeado de jardines con alguna fuente y con un aspecto algo decadente, como casi todo en este complejo. Antes de acceder al palacio/museo, hay que descalzarse y una vez dentro te quitan la cámara de fotos y entonces puedes empezar a curiosear por habitaciones y salones. Me llamó especialmente la atención la distribución, esos pasillos agradables que daban al jardín o las persianas que aislaban unas estancias de otras. En general, estar en el palacio me gustó, pero no el museo, muy
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