Perdido en la mayor soledad del mundo y...
Perdido en la mayor soledad del mundo y rodeado por un magnífico bosque a escasos cinco kilómetros del minúsculo pueblo de Nemesnép que ni tan siquiera viene en un mapa convencional, se encuentra este agradable hotel.
Llegamos al mismo ya de noche cerrada cerca de las diez de la noche. El viaje desde Brescia de 690 kms se nos hizo bastante pesado.
En la autopista italiana en el peaje que hay en la salida de Venecia sur tuvimos un parón de cerca de dos horas. Más adelante en otro peaje existente en la bifurcación a Triestre tuvimos otro de mas de una hora. Menos mal que desde aquí hasta la frontera con Hungría, pasando por Undine y hasta ciudad austriaca de Graz fue todo una autopista que aunque ya se metía en el principio de los Alpes fue bastante tranquilo y casi sin circulación. Para colmo de nuestros males al llegar a la frontera austriaco-húngara nos tuvieron otras dos horas de espera. Al llegar cerca del paso fronterizo nos dimos cuenta del porqué de esto. Resulta que a pesar de ser ya de la UE paraban a todos los coches con matrícula italiana, pedía la documentación a los ocupantes del vehículo y luego registraban el mismo.