Hará un par de años que me alojé en es...
Hará un par de años que me alojé en este hotel, cuando fui a pasar un fin de semana a Palencia para visitar a unos amigos. Es un hotel de 4 estrellas que se encuentra en el extrarradio de la ciudad, aunque puedes ir andando al centro dando un paseíto de unos 15 minutos. El hotel estaba genial (en la línea de la cadena AC), era nuevo y ofrecía todo tipo de prestaciones acorde a su categoría: Servicio de habitaciones 24h, wifi (de pago)... E incluso tenía un pequeño gimnasio , sauna y dos pequeñas salas para conferencias. Tenía aparcamiento en el sótano, pero no hizo falta porque en la calle (a la misma puerta) había sitio para aparcar perfectamente.
Nada más entrar, junto a la recepción, había un enorme lobby muy luminoso con un montón de sillones y mesitas bajas de cristal donde podías sentarte a leer (había prensa gratuita), ver la tv, o a tomar algo (servicio de bar). Había también una mesita con un ordenador y conexión a internet. La decoración sigue la línea de la cadena, era moderna, en maderas oscuras, y no le faltaban todo tipo de detalles y adornos (cuadros abstractos, jarrones, alguna escultura de arte moderno...); me pareció muy bonito y decorado con gusto.
La habitación no es que fuera excesivamente grande, pero me gustó mucho, también decorada en plan moderno. Había lo típico: Dos camas de 90 juntas, mesa escritorio, minibar (que servía de mesita donde estaba colocada la tv), reposamaletas, y un armario empotrado de estética japonesa. La cama era muy cómoda e incluso tenías menú de almohadas.
El baño era precioso, todo de mármol verde oscuro, con un lavabo de cristal templado que en la misma pieza hacía su encimera. Por supuesto, el wc, bidé, y una gran bañera con su mampara de cristal. Tenía una buena iluminación y el agua salía con buena presión; incuso la ducha tenía varias posiciones para regular el caudal.
El desayuno buffet era espectacular, súper variado (fiambres, amplio surtido de bollería, frutas, cereales, zumos de varios tipos, etc) y los productos de una excelente calidad. En la sala de desayunos no se permite fumar, pero puedes desayunar en el lobby, donde también tienes una máquina de café que puedes utilizar a cualquier hora del día.
Me gustó mucho este hotel, a pesar de no ser céntrico, y para los servicios y el trato que ofrece nos resultó muy bien de precio (60€ la habitación doble, incluyendo el desayuno).