Para empezar, ya la propia decoración ...
Para empezar, ya la propia decoración del restaurante te llama la atención. Está todo cuidado al detalle y eso siempre es un buen primer paso.
Después, el servicio, atento e inmejorable. Además, tuvimos la suerte de conocer al encargado que nos atendió de forma inigualable.
Pero es que, además, los platos estaban excelentes y acompañados de un buen vino de la tierra consiguieron que el inicio de nuestra ruta gastronómica por Extremadura fuera de primera clase. En el vistazo rápido que pudimos echar al hotel, que está situado, por cierto, a unos pasos del centro histórico de la