Está bien situado, no intramuros
Está bien situado, no intramuros, pero solo hay que atravesar la carretera para meterte en esa maravilla arquitectónica que es Zamora.
Era sábado de un fin de semana de Pascua, y llegamos sobre las 21h, en un correo anterior me llegaron instrucciones sobre como acceder al hotel cuando no hay personal en recepción, y he de admitir que no llegué al final de su lectura sin pensar que esa info era valiosa, y no atinamos con el aparatito que hay en la puerta y que facilita la tarjeta, eso cansados, con calor y cargados no apetece demasiado, pero atendieron con prontitud a la llamada de auxilio : ))
Por lo demás el sitio está puesto con detalle y buen gusto por una anfitriona que se desvive por el negocio y en agradar a sus clientes, la mesa del desayuno es primorosa, y la habitación cómoda.