En vez de hotel monumento histórico
La joya absoluta de la calle Grand' Rue, lo que en su momento fue el mejor hotel de toda la región, ahora es uno de los monumentos históricos de más renombre de la ciudad de Poitiers.
Jean de Moulins, señor de Rochefort y secretario personal del rey Luis XI, decidió fundar su propio hotel, que desgraciadamente no pudo ver terminado. El hotel fue terminado por el alcalde de Poitiers en el siglo XVII, Isaie Brochard, quién lo mandó reconstruir de acuerdo con las tendencias estéticas de la época.
Este precioso edificion funcionó como hotel de lujo en esta ciudad desde el siglo XVII hasta el siglo XVIII. Fue a finales de este último siglo que el gobierno de la ciudad lo declaró monumento de la ciudad y funciona desde entonces como museo y exposición de la arquitectura local y regional.
