mucho más que un simple hotel
¿Qué es lo que uno pide cuando desea alojarse en un entorno fantástico? En mi caso un hotel perfecto, cómodo, agradable y acogedor.
Una de las principales curiosidades del hotel es que se encuentra en la calle Francesa número 8, tramo final del recorrido original del Camino de Santiago. Interesante, ¿verdad?
La zona, Frómista, es castellana pero con ciertas influencias cátabras. Los paisajes merecen la pena, es uno de los puntos fuertes, sin duda. En cuanto al hotel en cuestión, no te pierdas las fotos, hablan por si solas, las habitaciones son de lo más acogedor y el detalle de la excelente bañera en la habitación es una pasada.