Juan Rodríguez Pérez
Llegamos a este hotel por casualidad,...
Llegamos a este hotel por casualidad, haciendo un recorrido de fin de semana por la provincia de Soria y atraídos por su cercanía al Parque Natural del Cañon del Río Lobos. Al principio su decoración un poco recargada nos chocó un poco, pero mi pareja y yo estuvimos en la gloria. El trato fue muy amable a la entrada, a pesar de que llegamos un poco tarde.
Las habitaciones son muy limpias y bien equipadas y nos dieron una con una cama enorme. El hotel estaba muy bien situado, aunque entramos por una puerta que da a la carretera, resulta que por el otro lado sale a la misma plaza Mayor del pueblo, que por cierto es precioso.
Nos dejaron usar sin coste el jacuzzi que había en la tercera planta. El desayuno del día siguiente fue más que correcto y el precio nos resultó muy muy ajustado.
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