La Casa De Juansabeli

El Hotel la Casa de Juansabeli está fuera del núcleo urbano de Arenas de Cabrales, al lado de la gasolinera del pueblo. Esto por un lado tiene el inconveniente de tener que coger el coche, pero por otro lado tendremos más tranquilidad y unas bonitas vistas a las montañas, además de un amplio aparcamiento.

El hotel es de estilo rural, con una decoración muy acogedora, y sin dejar de lado ninguna comodidad. Tiene ascensor para subir a las habitaciones.
En cuanto a las habitaciones, están son de un tamaño normal, con una cama cómoda y grande, y con unas vistas impresionantes a los montes de alrededor o al río que discurre a un lado del hotel. Si nos cuesta dormir con ruidos, mejor pedir una habitación alejada del río y las cascadas, que de noche se oye.

Es un hotel rural y muy acogedor rodeado de montañas y una cascada preciosa. Tiene restaurante con chimenea donde degustar magníficos platos, como revuelto de setas con jamón ibérico y verduras, cordero relleno con patatas paja, arroz con leche caramelizado, todo ello emplatado con exquisito gusto y todo buenísimo.

También he disfrutado de un desayuno completo compuesto por zumo de naranja natural, café, bollería variada, tostadas de pan de leña y embutido de la tierra variado, todo muy rico.

Las habitaciones son amplias, con grandes baños y con servicio de tocador y secador. Hay que añadir que dispone de ascensor a todas las plantas.

La estancia fue increíble,los dueños te tratan como de su familia,las comidas en el restaurante echas por su hijo, el GRAN(en mayúsculas)cocinero eran excepcionales, unos plato que ademas de estar buenísimos eran de restaurante de un montón de tenedores. Hicimos la ruta del Cares y nos impresiono muchísimo, es un poco dura pero merece la pena,en realidad nos gusto mucho la zona y nos gustaría volver otra vez.

En la recepción nos atendió un chico super amable que nos explico genial todo lo que le preguntamos. La habitación muy amplia y limpia con vistas a la montaña. Recomendable 100%