Buen hotel, mala playa
Es un hotel inmenso, con 760 habitaciones bastante grandes y con el baño también con buen tamaño. A mí no me suelen gustar los hoteles tan grandes pero la verdad es que resultaba bastante tranquilo ya que está rodeado de vegetación de manera que cuando vas andando por los caminos del hotel no ves ni siquiera los edificios. Tiene varios restaurantes, algunos temáticos para los cuales tienes que reservar en las mesas que están frente a la recepción del hotel. El Beach Club está genial puedes desayunar y comer, de frente al precioso mar. También tiene varias piscinas, una al lado del Beach Club con agua salada ya que está abierta al mar.