Palace Hotel do Bussaco

En este impresionante Palacio de Buçaco estuve varias veces de visita. Por su lugar de ubicación a 2 km de las termas de Luso (centro de Portugal) en el alto de una colina que hace las veces de parque de la naturaleza se conoce como " El bosque encantado".

Actualmente el Palacio es un hotel de cinco estrellas con 62 habitaciones con baño, teléfono, televisor, aire acondicionado, restaurante, bares, salones, capilla, y sobre todo jardines, unos preciosos jardines que pueden ser visitados por cualquier persona en el imponente altar de la naturaleza (105 Ha amuralladas) donde se levanta este antiguo monasterio carmelita hoy convertido en hotel.

La verdad es que aunque suene un poco cursi, cuando llegas es como un cuento de hadas. Es un palacio neo-manuelino, único en el mundo, erigido por los reyes portugueses al final del siglo XIX, como casa de descanso. El palacio está decorado con pinturas del pasado histórico de Portugal, azulejos, escaleras de mármol, tapicerías, cuadros y objetos de arte de algunos de los artistas portugueses más notables. Situado al norte de Coimbra, entre Lisboa y Oporto, rodeado de jardines clásicos en el corazón del magnífico bosque nacional de Bussaco, con 105 hectáreas. Está bajo gerencia de la familia de Alexandre de Almeida, desde 1917, se convirtió en una de las casas más grandiosas de Portugal y uno de los hoteles mejores hoteles del mundo.

El Hotel Palace de Buçaco se encuentra escondido en el medio del increíble bosque de Buçaco y está considerado como uno de los establecimientos más elegantes del mundo, y no es para menos.
Lo construyó en el siglo XX el arquitecto y coreógrafo italiano Luigi Manini, aunque también participaron otros arquitectos como Manuel Joaquim Norte y Jóse Alexandre Soares. En un principio fue creado como residencia para la familia real portuguesa cuando esta iba de caza, pero sólo la utilizaron una vez. Después de la segunda Guerra Mundial se convirtió en lo que es en la actualidad, un hotel impresionante al que acuden cada año personas de la alta sociedad.