Emplazada en un rincón escondido del ...
Emplazada en un rincón escondido del precioso pueblo de Candelario, esta Posada Real derrocha calidez, sosiego y mucho encanto. La Casa de la Sal data del S. XVIII. Por fuera parece una casa más del pueblo serrano, pero dentro los espacios tienen un aire cosmopolita y despojado. Con el color blanco como protagonista, el gusto con que la posada está decorada es simplemente exquisito. Casa de la Sal tiene diez habitaciones ambientadas con detalles diferentes, a cada cual más bonita.