Arquitectura y espiritualidad
Esta preciosa Iglesia ubicada en la zona histórica de Bogotá, es una verdadera joya colonial.
Fue declarada- en la última década del siglo XX -como monumento Nacional. Es un lugar mágico, atemporal y misterioso. Las callecitas que la rodean hablan voces de otras épocas, los susurros que trae el viento nos transportan a una Bogotá distinta y fantasmagórica. Más allá de ser un sitio destinado para expresar la fe, se puede considerar como un verdadero depósito de arte. Sus delicados y antiguos frescos pintados sobre sus viejas paredes son iconos de belleza, simplicidad y armonía. Sus cuadros,