Iglesia gótico-renacentista peculiar
Antiguamente los núcleos poblacionales se construían alrededor de iglesias u otros símbolos religiosos. Éste es el caso de San Agustín de Etxebarria, iglesia y sitio que dio lugar a lo que se conoce como "Anteiglesia de San Agustín de Etxebarria", un núcleo poblacional que se anexionó a la villa de Elorrio allá por el siglo XVII, pasando a conformar lo que hoy se conoce como Barrio de San Agustín.
Hay constancia que la iglesia original fue fundada en el siglo XI, aunque el edificio que se puede contemplar hoy en día data del siglo XVI, siendo de estilo gótico-renacentista. Destaca el grosor de sus muros, de más de un metro y su altiva torre barroca del siglo XVII. Otra característica curiosa, lo totalmente "cerrada" que aparece la iglesia hacia el Norte, debido a la dureza del clima probablemente, siendo la orientación Sur la orientación predominante, por la lógicamente entra casi toda la luz que recibe la iglesia. Destacan también los dos pórticos que jalonan los laterales de la iglesia, con bastante estructura de madera antigua y resistente, en curiosa combinación con los gruesos muros. Se sustentan estos pórticos por finas columnas, algunas de ellas con capiteles decorados en bastante buen estado de conservación. La iglesia dispone de una pequeña capilla donde, según la tradición, se supone que reposan los sarcófagos de piedra con los restos de los condes que dictaminaron en su día la construcción de la iglesia. Como nota final de esta esbelta iglesia llena de curiosidades, decir que varias piedras utilizadas en su construcción llevan la marca personal del cantero que en su día las trabajó, es decir, piedras personalizadas para una iglesia importante y personal.
